Costumbres que han llegado para quedarse luego de la pandemia de Covid-19

 

A medida que los planes de vacunación van avanzando en el mundo, es momento de pensar qué es lo que deparará nuestra vida en lo que muchos han dado por nombrar “la nueva normalidad”. En ese sentido, es indudable que el Coronavirus ha cambiado la manera en la que pensamos y realizamos diversas actividades, así como también cómo nos vinculamos con nuestro entorno. Es por ello que en el siguiente artículo nos encargaremos de pensar qué costumbres pueden haber llegado para quedarse.

En los planes de nadie figuraba la llegada de una pandemia que colocara a la vida de millones de personas cabeza abajo, echando por tierra cualquier tipo de pronóstico y plan de acción. Luego de más de un año y medio con el Covid-19 teniendo en vilo a la población mundial, los planes de vacunación se han ido sucediendo con éxito en diferentes territorios y parece haber comenzado lo que muchos conocen como “la nueva normalidad”. Ese término, entre líneas, marca el comienzo de nuevas costumbres y deja atrás otras. En este artículo nos centraremos en repasar algunas de las más importantes para que el futuro no te tome desprevenido.

En primer término, no se puede dejar de nombrar el boom que se vive en torno a las criptomonedas, ya que hoy en día todo el mundo se pregunta qué se necesita para comprar Bitcoin. La digitalización de la economía era una tendencia que ya llevaba muchos años, pero la pandemia no ha hecho más que acrecentar ese ritmo y potenciar dicha curva, por lo que hoy en día debemos pensar que los más jóvenes tienen otra relación con el dinero y el empleo. Las formas de invertir, ahorrar y operar dentro del mundo online han llegado para quedarse.

En la misma sintonía, otra idea que cobra cada vez más peso es el fin del dinero en objetivo, al menos en las grandes metrópolis del mundo. Con el uso de las tarjetas y los nuevos bancos digitales, que permiten pagar mediante la utilización del teléfono móvil, es muy frecuente que los más jóvenes salgan sin dinero suelto, por lo que ha obligado a muchos comercios a actualizarse. Este factor también ayuda a una mayor formalidad económica, permitiendo que los diversos sectores productivos y económicos se vean fortalecidos por la digitalización. ¿Será parte del pasado el temor a olvidarse la billetera?

Por último, y no menos importante, es la importancia que han tomado las formaciones en línea. Las carreras de distintos niveles y especialidades han logrado crear planes de estudios sofisticados a distancia que, más allá del futuro del virus, permiten acercar propuestas educativas miles de personas que se encuentran a distancia. En ese sentido, el prejuicio en torno a la educación remota se ha perdido en este último año y medio y se espera que la matriculación dentro de este campo vaya en aumento. Después de todo, ¿qué mejor que recibir la mejor formación para tu futuro sin moverte de tu hogar?